El concepto de "modo de pensar" en la toma de decisiones no está explícitamente definido en los resultados de búsqueda, pero podemos explorar cómo los diferentes modos de pensamiento y enfoques estructurados mejoran los procesos de toma de decisiones.
Modos de pensamiento
La toma de decisiones puede estar influenciada por dos modos principales de pensamiento: intuitivo/afectivo y analítico/deliberativo. La investigación sugiere que las manipulaciones intuitivas o afectivas pueden mejorar la calidad de la decisión en comparación con los enfoques puramente analíticos o deliberativos, especialmente en las decisiones complejas [1] [2]. El pensamiento intuitivo implica tomar decisiones basadas en sentimientos intestinales o respuestas emocionales, lo que puede ser beneficioso cuando se trata de opciones complejas de atributos múltiples. Este modo permite la integración implícita de los valores y puede conducir a mejores resultados de decisión cuando se combina con distracción o cuando se usa en decisiones inmediatas sin presión de tiempo [1] [2].
Enfoques estructurados
Los marcos estructurados como los modelos mentales y los marcos de toma de decisiones pueden mejorar significativamente la calidad de la decisión. Los modelos mentales proporcionan un enfoque estructurado para pensar y evaluar opciones, ayudar a las personas a enmarcar problemas, clasificar la información y predecir los resultados [4]. Actúan como plantillas que guían el procesamiento y el razonamiento de la información, lo que permite una toma de decisiones más informada y crítica [4].
El marco 3-2-1-GO es otro enfoque estructurado que describe una hoja de ruta clara para la toma de decisiones, que involucra etapas como definir el problema, desarrollar opciones y tomar una decisión [3]. Dichos marcos ayudan a garantizar que los procesos de toma de decisiones sean sistemáticos y bien considerados, reduciendo la probabilidad de decisiones impulsivas o mal informadas.
Pensamiento crítico
** El pensamiento crítico también es crucial para mejorar la toma de decisiones al fomentar el razonamiento lógico y las habilidades analíticas [5]. Ayuda a las personas a evaluar la información objetivamente, identificar sesgos y tomar decisiones más racionales. El pensamiento crítico fomenta un enfoque sistemático para la toma de decisiones, asegurando que todos los factores relevantes se consideren antes de tomar una decisión [5].
En resumen, mejorar los procesos de toma de decisiones implica aprovechar modos intuitivos de pensamiento, emplear marcos estructurados como modelos mentales y aplicar habilidades de pensamiento crítico. Estos enfoques ayudan a garantizar que las decisiones estén bien informadas, sistemáticas y efectivas.
Citas:[1] https://www.frontiersin.org/journals/psychology/articles/10.3389/fpsyg.2011.00037/full
[2] https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/pmc3110939/
[3] https://www.linkedin.com/pulse/how-improve-decision-raking-reuben-rusk
[4] https://miro.com/brainstorming/mental-models-and-decision-making/
[5] https://www.forbes.com/councils/forbescoachesconcil/2023/07/28/enhancing-decision-making-and-probling-solving/
[6] https://www.managementcenter.org/resources/modes-decision-making/
[7] https://www.rsm.nl/education/executive-education/short-courses/personal-effectivity/decision-power-Creall-thinking-for-better-decision-comking/
[8] https://study.com/academy/lesson/the-rational-decision-making-model-steps-and-purpose-in-organizations.html